Artemio Precioso Ugarte


 

Artemio Precioso nace en Hellín (Albacete) el 12 de abril de 1917, aunque al cumplir los tres años se traslada a Madrid y a los diez al exilio. Sus primeros estudios se desarrollarán entre Madrid, París, San Sebastián, Hellín y Toledo, para terminar estudiando Derecho en Madrid. En el momento de cursar el tercer año de Derecho, se produce el levantamiento militar fascista, incorporándose, como voluntario a las milicias. Durante los tres años de guerra recorre diversos frentes, siendo herido en dos ocasiones. En los primeros días de marzo de 1939, estando al mando de la 206ª Brigada, aplasta la sublevación casadista y falangista de Cartagena.

    Tras el triunfo socialista de 1982 colabora —aún sin ser militante—, con el Grupo Federal de Ecología y Medio Ambiente del PSOE. Por entonces, el diario ABC acusa a Greenpeace (que había sido creada en 1971) de pasividad ante las tropelías cometidas por la URSS; y Precioso es un blanco perfecto por haber pertenecido al ejército Soviético. Es entonces cuando envía una carta al director del rotativo en la que critica la relación que se hace en el periódico entre su militancia ecologista y pacifista con la estancia en la Unión Soviética, a la vez que acusa al diario de omitir su ruptura ideológica con la política de la URSS, país al que no considera socialista, manifestada por él públicamente en varias ocasiones. Terminando la misiva: “Lo que no significa que ejerza el antisoviétismo ni que haya olvidado mi gratitud hacia los países que me ofrecieron asilo político” Que será publicada en ABC, el 6 de julio de 1983. En ella describe su periplo por la Europa del Este, lo que sirve para recordar de primera mano su evolución desde el final de la guerra. En ella cuenta su llegada a la URSS en 1939 como refugiado político, siendo admitido, sin solicitarlo, como alumno de la Escuela Militar Frunze de Moscú, con e| mismo grado de mayor que obtuvo en el “Ejército constitucional de la República Española”, al que se incorporó voluntariamente como miliciano raso en julio de 1936. En 1944, el grupo de españoles que cursan estudios en academias militares soviéticas y, tras desempeñar algunos de ellos durante unos dos años la función de profesores auxiliares de táctica, son ascendidos al grado inmediato superior, en el caso de Precioso a teniente coronel. Al terminar la Segunda Guerra Mundial, entre los años 1946 a 1948, es consejero, sin mando, del ejército de Yugoslavia. Después, con una beca de la Unión Internacional de Estudiantes llega a Praga, donde acaba la licenciatura y el doctorado. Consigue ser catedrático de Planificación Macroeconómica en la Escuela Superior de Economía de Praga. Por estas fechas, manifiesta sus discrepancias con el estalinismo y tiene enfrentamientos importantes con Enrique Lister, aunque sigue afiliado al PCE hasta su legalización en 1977.


A comienzos de los años 60, regresa a España legalmente junto a su familia, siendo detenido en varias ocasiones y vigilado constantemente, con la acusación de actividades comunistas. Pone en funcionamiento varias empresas de comercio exterior y se convierte en uno de los pioneros del ecologismo. Según Bigues, explica su militancia así: “soy pacifista pues he participado en dos crueles guerras y ecologista por mi trayectoria como estudioso de la macroeconomía”. En 1979, funda el Centro de Estudios Sociecológicos, dirige una de las primeras etapas de Greenpeace España ‒es uno de sus fundadores en 1984‒, crea la fundación Gondwana en 1990 y ayuda a la consolidación de Ecoforum.

    Según Jordi Bigues, tras el desastre de Chernobil en 1986, una delegación de Greenpeace, compuesta por Precioso y Bigas, miembros de su Junta Directiva, visita la embajada de la URSS en Madrid, donde son recibidos por el primer secretario. Piden que la potencia se sume a la iniciativa de Carlo Rubbia, premio Nobel de Física, para desmantelar las centrales nucleares antes de 2010. Precioso declara que la URSS conoce las catastróficas consecuencias de un accidente nuclear y por eso debe hacer un llamamiento al resto del mundo en ese sentido. Por su encargo se elabora el informe 1992 sin nucleares, un proyecto para sustituir la energía electro-nuclear en España, publicado en 1987. Precioso aporta mucho al ecologismo y a Greenpeace, ya que es un luchador incansable, además de persona de convicciones sólidas que dedica su vida a la defensa de los derechos humanos y, en especial, del medio ambiente. Es por eso que, es designado, en 1993, miembro del Foro Consultivo de Medio Ambiente de la Unión Europea y nombrado presidente honorario de Greenpeace en 2003. En el año 2006, recibe el premio Nacional Extraordinario de Medio Ambiente, siendo Cristina Narbona Ruiz ministra de Medio Ambiente. Además, es autor de numerosas publicaciones, en el área de la economía del medio ambiente. Años después de su muerte, que tuvo lugar en Madrid, el 15 de agosto de 2007; en 2013, se convoca la primera edición de los premios Artemio Precioso, con los que Greenpeace España honra su memoria y los valores compartidos con el destacado ecologista.


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Ramón Martín


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