Martina Castells i Ballespí

 

Nuestro personaje fue la primera mujer que consiguió doctorarse en medicina en España, siendo por lo tanto una pionera que indicó el camino a seguir a generaciones posteriores de mujeres, que priorizaron su educación y su emancipación frente al papel que se les presuponía por la sociedad de la época.

Martina nació el 23 de Julio de 1852 en Lleida (España) en el seno de una familia donde, su padre, su abuelo y tres de sus hermanos fueron médicos, por lo que no es de extrañar que la futura doctora Castells, tuviera vocación de ser médico. Pero el camino no fue fácil, ya que tuvo que superar diversos obstáculos para poder estudiar, algunos de tipo familiar; pero eso no menoscabó la ambición de Martina, la cual consiguió acabar sus estudios secundarios en su ciudad natal, para posteriormente matricularse en la carrera de medicina en la Universidad de Barcelona en el año 1877.

Nos encontramos en la década de los setenta del Siglo XIX, años donde se comienza a notar una importante evolución en la mentalidad de las gentes, lo que da lugar a que se produzcan, poco a poco, importantes cambios en el país. Aunque no de una manera drástica, se va notando cierta apertura, por lo que el pensamiento de nuestras mujeres, no se centrará solo en obtener mejoras en el acceso a la educación, sino en otros ámbitos, para lograr sacar a las mujeres del anonimato en la que estaban recluidas. Esta actitud choca frontalmente con el de la mayoría de la sociedad masculina, muy preocupada por el papel que podría jugará la mujer fuera de los roles establecidos; así como la posición en la que quedaría la figura masculina si la mujer no es capaz de compaginar con acierto estos roles con las nuevas tareas que están intentando desempeñar.

Martina termina sus estudios en la Universidad en el año 1881, pero eso no significa que, automáticamente, obtuviese un título que la capacitaba para ejercer la medicina, debe realizar un examen de Licenciatura. Este examen tardó en llegar, pero ella no quiso perder tiempo e inmediatamente se matriculó en los cursos que daban acceso al doctorado. El 20 de junio de 1881, solicitó los permisos oportunos para examinarse del grado de licenciado, lo que le fue concedido el 4 de abril de 1882, al mismo tiempo que a Dolors Aleu. El examen tuvo lugar los días 10 y 25 de abril de ese mismo año y en él obtuvo la calificación de aprobado. Ese 1882 también cursó en Madrid el doctorado y en un acto académico celebrado el 9 de octubre, en el que intervino el doctor José de Letamendi, defendió la tesis Educación física, moral e intelectual que debe darse a la mujer para que ésta contribuya en grado máximo a la perfección y a la de la humanidad, en la que abogaba por la equiparación de derechos académicos, sociales y culturales para las mujeres. El 4 de Noviembre de ese mismo año logra doctorarse, con lo que se convierte en la primera mujer que lo hace en el campo de la medicina, la segunda de España; tras María Isidra de Guzmán y de la Cerda, que se doctoró en 1785 en Artes y Letras Humanas.

A partir de ese momento, no fue nada fácil el camino que tuvo que recorrer, aun siendo consciente de las desigualdades de las que eran víctimas las mujeres. Tomó conciencia de que debía que luchar, con todas sus fuerzas, para conseguir su sueño, abrió su propia consulta de pediatría y se casó con el doctor Antonio Constantí, médico militar y del Instituto Pere Mata de Reus; empezaba a conseguir cada vez más clientes y prestigio. Todo parecía augurarle un futuro prometedor y lleno de éxito; pero quedará embarazada y las complicaciones del embarazo, sumadas a una nefritis, hizo que falleciese el 21 de enero de 1884 en la ciudad de Reus, con tan solo 31 años.

Ramón Martín